Tensión entre Trump y Ramaphosa por acusaciones de “limpieza étnica” en Sudáfrica

El presidente sudafricano y su homólogo estadounidense se enfrentan por controversias sobre la comunidad blanca en Sudáfrica.
La visita de Cyril Ramaphosa a la Casa Blanca se vio empañada por acusaciones de Donald Trump sobre una supuesta “limpieza étnica” contra granjeros blancos en Sudáfrica, desviando la atención de temas de comercio y cooperación tecnológica.
En su visita a la Casa Blanca, el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa se vio envuelto en momentos de tensión con su homólogo estadounidense Donald Trump, quien lo acusó de llevar a cabo una supuesta “limpieza étnica” contra los granjeros blancos en Sudáfrica. A pesar de que la agenda inicial de la reunión se centraba en temas de comercio y cooperación tecnológica, las acusaciones de Trump cambiaron el rumbo del encuentro.
Durante la comparecencia conjunta en la Oficina Oval, Trump mostró un video en el que se veía al líder opositor sudafricano Julius Malema cantando una canción que incluía la frase “shoot the Boer” (“disparen al bóer”), haciendo referencia a la comunidad blanca de origen holandés en el país africano. Trump calificó el video como “terrible” y acusó al gobierno sudafricano de estar implicado en genocidio y confiscación de tierras.
Ramaphosa, por su parte, defendió el sistema democrático de su país y señaló que la criminalidad en Sudáfrica afecta a blancos y negros por igual. Aunque reconoció que ha habido ataques a granjeros blancos, argumentó que constituyen una pequeña fracción de la tasa general de criminalidad en el país. Además, explicó que el líder opositor Malema y su partido no representan la política oficial sudafricana.
La emboscada de Trump hacia Ramaphosa contrasta con la recepción a otros líderes extranjeros en la Casa Blanca desde que asumió su cargo nuevamente. Trump incluso mostró artículos sobre la violencia en Sudáfrica y justificó un programa de reasentamiento de afrikáners blancos en Estados Unidos, alegando violaciones de derechos humanos contra blancos en Sudáfrica, incluyendo expropiaciones de tierras y ataques violentos en zonas rurales.
Los afrikáners, descendientes de colonos europeos que han desempeñado un papel central en la historia de Sudáfrica, han sido objeto de controversias debido a la implementación de la Ley de Expropiación de 2024, que permite al gobierno confiscar tierras sin compensación. A pesar de las acusaciones de Trump y grupos conservadores, el gobierno sudafricano niega la existencia de persecución racial y considera infundadas las acusaciones de genocidio contra la comunidad blanca.
La embestida de Trump hacia Ramaphosa revela tensiones sobre la situación de los granjeros blancos en Sudáfrica, mientras el gobierno sudafricano niega las acusaciones de genocidio y persecución racial.