La importancia de la tierra en la bioarquitectura: construcciones más sostenibles y saludables.

Descubre cómo la bioarquitectura está revolucionando el mundo de la construcción a través del uso de la tierra como material principal.
La bioarquitectura ha cobrado relevancia en la industria de la construcción gracias a sus beneficios en resistencia, durabilidad y salud humana. En un seminario en La Paz, se destacó la importancia de la tierra como elemento fundamental en este enfoque arquitectónico, resaltando sus propiedades ecológicas y sostenibles.
La bioarquitectura, basada en el uso de materiales naturales como la tierra y las fibras vegetales, ha ganado relevancia en el ámbito de la construcción debido a sus beneficios tanto en la resistencia y durabilidad de las edificaciones como en la salud humana. En un reciente seminario realizado en La Paz por colectivos ambientales, se abordó el tema de la tierra como elemento fundamental en la bioarquitectura, definiéndola como una forma de proyectar construcciones basada en principios naturales y utilizando recursos locales disponibles en el ecosistema.
La tierra, considerada el material más humilde y ecológico, ha sido subestimada por los constructores a pesar de sus propiedades térmicas, durabilidad y resistencia. La arquitecta Pacha Yampara destaca la importancia de emplear la tierra en la construcción, resaltando que es un material vivo que ofrece propiedades sin costo alguno y que ha sido relegado en favor de materiales convencionales como el ladrillo y el cemento.
En contraposición, la fabricación de ladrillos y cemento conlleva la emisión de gases contaminantes y el consumo excesivo de recursos energéticos, lo que contribuye al deterioro del medio ambiente y puede tener efectos nocivos en la salud de las personas. Por ejemplo, los humos liberados durante la elaboración de ladrillos contienen sustancias que pueden ser cancerígenas, mientras que la exposición al cemento puede causar quemaduras químicas en la piel y afectar el sistema respiratorio.
En cuanto a las propiedades de la tierra como material de construcción, se destaca su capacidad para regular la humedad, permitir la permeabilidad al vapor y adaptarse a personas con problemas respiratorios. Los muros de tierra son considerados como estructuras que “respiran”, ofreciendo beneficios estéticos, funcionales y ambientales superiores a los materiales convencionales.
La arquitecta Yampara ejemplifica la resistencia de la tierra en construcciones precolombinas como las chullpas, que han perdurado por siglos sin necesidad de restauración. En este sentido, se resalta la importancia de reconocer el potencial de la tierra como material de construcción versátil y sostenible, capaz de contribuir a la reducción de la contaminación ambiental y promover espacios habitables más saludables y resistentes en el tiempo.
La tierra se posiciona como un material de construcción versátil, sostenible y beneficioso para el medio ambiente y la salud de las personas. Su uso en la bioarquitectura promueve la creación de espacios habitables más saludables y resistentes en el tiempo.