Crisis en Salud de Tarija: Impago de Salarios y Amenaza de Paralización de Servicios

El sistema de salud en Tarija enfrenta una coyuntura crítica, marcada por la incertidumbre laboral y el impago de remuneraciones, lo que amenaza con la paralización de los servicios esenciales. La inquietud se extiende por todo el departamento, abarcando la capital, Bermejo y Villa Montes, donde los profesionales del sector han intensificado sus acciones de protesta.
Representantes del ámbito sanitario en Bermejo y Villa Montes, en consonancia con el Colegio Médico, han manifestado su profunda preocupación por la situación crítica que atraviesa el sistema departamental. La acusación principal se centra en la administración departamental, a la que se le atribuye una gestión inconsistente de los recursos y una postura que ha sido calificada de inestable. Las autoridades regionales, por su parte, aseguran la disponibilidad presupuestaria, contradiciendo los argumentos sobre la escasez de fondos esgrimidos desde la Gobernación. Esta disparidad ha desencadenado diversas medidas de presión, incluyendo una interrupción de servicios de 48 horas en Villa Montes y una de 24 horas en Cercado, ante el riesgo inminente de un colapso en la atención médica en todos sus niveles.
La escasez de recursos económicos está impactando severamente al sector salud, particularmente en lo que respecta a los ítems financiados por la Gobernación, afectando tanto al hospital de Bermejo como a la coordinación de la red local. Esta problemática no se circunscribe a una única localidad, sino que se ha evidenciado a nivel departamental, impulsando la movilización conjunta de diversas organizaciones gremiales. La situación se replica en la capital, con concentraciones y marchas en la región del Chaco, en una demanda unificada para que se respeten los derechos de los trabajadores.
La reivindicación de los profesionales se articula en torno a dos ejes fundamentales: la garantía de estabilidad laboral para aquellos con ítems departamentales y la exigencia del pago oportuno de sus salarios. Se ha señalado que la remuneración correspondiente al mes de mayo fue abonada recientemente, quedando pendientes los pagos de junio y el próximo de julio.
Trabajadores de la salud en Villa Montes han confirmado la gravedad de la situación, anunciando una medida de fuerza de dos días debido al retraso en el pago de sueldos de los ítems departamentales, cuyo desembolso estaba previsto para principios de julio. A nivel regional, se ha certificado la existencia de presupuesto para cubrir estas obligaciones, sin embargo, la administración departamental ha justificado la falta de pago argumentando insuficiencia de recursos, vinculados a la distribución del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH).
Ambos grupos de profesionales han expresado su inquietud ante los comentarios que circulan en la capital sobre una posible desvinculación de la Gobernación de la atención de primer y segundo nivel, e incluso del tercer nivel. Se percibe una fluctuación en las declaraciones de la autoridad departamental, lo que genera incertidumbre sobre el compromiso con el sector salud. Las comunicaciones formales de los trabajadores han recibido respuestas que simplemente niegan la disponibilidad de fondos sin ofrecer mayores explicaciones, a pesar de que los beneficiarios tienen la certeza de que los recursos están garantizados.
Esta crisis se agrava en un contexto de emergencia sanitaria nacional por sarampión, donde la fragilidad del sistema podría tener consecuencias aún más severas. Ya se ha alertado sobre el impacto de la desvinculación de un número significativo de profesionales en Cercado, con la amenaza de afectar a cientos más en los niveles primario y secundario de atención. Las organizaciones del sector enfatizan que no actúan de forma aislada, contando con el respaldo de instituciones cívicas y ciudadanas para defender sus derechos y asegurar la continuidad de la atención médica a la población, que será la principal perjudicada por estas decisiones