Feminicidios en Cochabamba y Santa Cruz dos mujeres pierden la vida en trágicos sucesos

Dos trágicos sucesos de violencia de género han conmocionado a Cochabamba y Santa Cruz, donde Evelin Andia O., de 19 años, y Mariana Camargo B., de 21, respectivamente, perdieron la vida en circunstancias que han sido clasificadas como feminicidio.
El sepelio de Evelin Andia O. tuvo lugar recientemente en el Cementerio de Villa El Carmen, ubicado en Cliza, municipio del Valle Alto de Cochabamba. La muerte de la joven fue oficialmente tipificada como feminicidio el 30 de julio. Su compañero sentimental, Wilber G.D., de 23 años, fue puesto bajo custodia policial luego de que su testimonio presentara inconsistencias. En su declaración, el individuo relató que el 29 de julio, tras consumir bebidas alcohólicas, se dirigieron en motocicleta a un estadio donde surgió una discusión. Según su versión, al girar la vista por un instante, observó a la joven precipitarse desde un tercer nivel. Aseguró haberla asistido, trasladándola en la motocicleta hasta su domicilio, desde donde se solicitó una ambulancia. Sin embargo, al llegar al centro médico, la víctima ya no presentaba signos vitales.
Las pesquisas preliminares sugieren que el deceso no fue resultado de un accidente. Los familiares de Evelin Andia O. claman por justicia y han refutado categóricamente la hipótesis de un suicidio. Sostienen que la víctima jamás habría atentado contra su propia vida, especialmente considerando a su hijo de dos años y a los hermanos menores a quienes brindaba sustento. Además, han revelado antecedentes de violencia por parte del detenido, incluyendo un episodio en Chile donde, según el testimonio de la joven a su familia, fue agredida físicamente mientras ambos trabajaban en ese país.
Paralelamente, Santa Cruz fue escenario de otro trágico feminicidio, con Mariana Camargo B., de 21 años, como víctima. El lamentable suceso tuvo lugar en la zona del Plan 3000, donde se presume que su concubino la sometió a una brutal agresión física antes de darse a la fuga. Fue su suegra quien la trasladó inicialmente al hospital de Los Pocitos. Dada la severidad de sus heridas, fue derivada al Hospital Japonés, donde lamentablemente falleció a consecuencia de las lesiones